30/4/18

Vence al Mal con El Bien

No seas vencido de lo malo, sino vence con el bien el mal. (Rom 12:21)

Necesitamos el Bien para vencer el mal, pero el bien de Dios, de Jesucristo en nosotros, entonces así se cumplirá lo que el verso nos dice y obtendremos la victoria sobre el mal (Rom. 8:31; 8:37), es mediante Dios, mediante Jesucristo, porque solamente él venció el pecado, la muerte, el mal.
Dios nos manda a seguir la Paz (Heb. 12:14), a ser pacificadores (Mt. 5:9), y debemos obedecerlo, aunque es difícil estar bien con todos, por que puede que haya personas a las que no les agrademos, y que obviamente no nos traten Bien, en tal caso algunas personas que viven sin Dios en sus vidas, reaccionan devolviendo mal por mal, pero nosotros los que hemos aceptado a Jesucristo, debemos seguir sus enseñanzas, y algunas de ellas son:
-       Amar a los enemigos” (Mt. 5:44),
-       No vengarnos” (Rom. 12:19),
-       No devolver mal por mal” (Rom. 12:17; 1 P 3:9),
-       perdonar las ofensas (Mt. 6:15),

Para vencer el mal, es importante obedecer esas enseñanzas de Jesús. Pero para actuar de esa manera, necesitamos la ayuda de Dios, de su Espíritu Santo, para que nos llene de amor por nuestros enemigos, y todo lo necesario para obrar como es debido y vencer. Si obedecemos a Jesús y amamos a los enemigos, obtendremos victoria, porque la obediencia a Dios trae bendición a nuestras vidas, en cambio a aquellos que obran mal, los siguientes versos nos muestran algunas de las cosas que les suceden:

El que da mal por bien, No se apartará el mal de su casa. (Pr. 17:13)

21 Si el que te aborrece tuviere hambre, dale de comer pan, Y si tuviere sed, dale de beber agua; 22 Porque ascuas amontonarás sobre su cabeza, Y Jehová te lo pagará. (Pr. 25)

Por lo tanto ya no debemos vengarnos de nuestros enemigos, pues eso es contrario a lo que Dios manda, en relación a esto la Biblia nos dice lo siguiente;

No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor. (Rom. 12:19)

Así que no debemos permitir que la maldad de otra persona produzca maldad en nosotros, pues Dios nos manda a bendecir a los que nos maldicen, porque si devolviéramos mal por mal, estaríamos desobedeciendo y dejando que el mal venza. Si permitimos que la maldad de una persona, nos lleve a obrar mal, entonces estamos siendo controlados y vencidos por el mal; pero no debemos permitir eso, no debemos dar ese poder, si nos hemos entregados a Dios, debe ser Cristo quien gobierna nuestras vidas, no quienes hacen el mal, debe ser Cristo quien determina nuestras actitudes, pensamientos y acciones.

Gracias por visitar el Blog, que Dios te bendiga.


En nombre de Jesucristo, amén.
Base Bíblica
Mateo 5:9 Bienaventurados los pacificadores, porque ellos serán llamados hijos de Dios.
Romanos 8:31 ¿Qué, pues, diremos a esto? Si Dios es por nosotros, ¿quién contra nosotros?
Romanos 8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
Hebreos 12:14 Seguid la paz con todos, y la santidad, sin la cual nadie verá al Señor.
Romanos 12:17 No paguéis a nadie mal por mal; procurad lo bueno delante de todos los hombres.
1 Pedro 3:9 no devolviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino por el contrario, bendiciendo, sabiendo que fuisteis llamados para que heredaseis bendición.
Mateo 6:15 mas si no perdonáis a los hombres sus ofensas, tampoco vuestro Padre os perdonará vuestras ofensas.
Mateo 5:44 Pero yo os digo: Amad a vuestros enemigos, bendecid a los que os maldicen, haced bien a los que os aborrecen, y orad por los que os ultrajan y os persiguen;
Romanos 12:19 No os venguéis vosotros mismos, amados míos, sino dejad lugar a la ira de Dios; porque escrito está: Mía es la venganza, yo pagaré, dice el Señor.

29/4/18

Jesucristo Sana Cuerpo Y Alma

El hecho de que Jesucristo murió por nuestros pecados, es lo más importante y lo más divulgado, pero nos es la única bendición que él consiguió por medio de su crucifixión, pues la Biblia dice que también Jesús en la cruz llevo nuestras enfermedades, sufrió nuestros dolores, fue castigado por nuestra paz, y por su llaga fuimos curados, esto lo podemos ver en los siguiente versos:

Ciertamente llevó él nuestras enfermedades, y sufrió nuestros dolores; y nosotros le tuvimos por azotado, por herido de Dios y abatido. Mas él herido fue por nuestras rebeliones, molido por nuestros pecados; el castigo de nuestra paz fue sobre él, y por su llaga fuimos nosotros curados. (Isaías 53:4-5)

Y en el verso siguiente podemos ver como Mateo, corrobora que hay “sanidad por medio de las llagas o heridas” que sufrió Jesucristo en su crucifixión.

para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias. (Mateo 8:17)

Así que, podemos ver, que la obra de Salvación de Jesucristo, incluye también Sanidad. Por esta razón, cuando Cristo vino al mundo, él sanaba a todos:

Y cuando llegó la noche, trajeron a él muchos endemoniados; y con la palabra echó fuera a los demonios, y sanó a todos los enfermos; para que se cumpliese lo dicho por el profeta Isaías, cuando dijo: El mismo tomó nuestras enfermedades, y llevó nuestras dolencias. (Mateo 8:16-17)

Y también Jesús envío a sus discípulos a anunciar que “el reino de los cielos se había acercado”, también les ordenó  que sanaran a todos los enfermos:

Y yendo, predicad, diciendo: El reino de los cielos se ha acercado. Sanad enfermos, limpiad leprosos, resucitad muertos, echad fuera demonios… (Mateo 10:7-8)

La Biblia relata muchos casos en los que Jesús realizo milagros de sanidad, y Jesucristo es el mismo ayer, y hoy, y por los siglos (Hebreos 13:8), lo que significa que su poder milagroso de sanidad, esta presente para sanar en el tiempo en que vivimos ahora, dice la Biblia “Porque yo Jehová no cambio…” (Malaquías 3:6), y Por medio de Jesús está disponible el mismo poder como en el pasado. Pero había algo en común en aquellos que eran sanados por Jesús, todo ellos tenían “FE”, por lo tanto ninguna sanación puede llevarse a cabo sin FE,  Jesús dijo a la mujer que tocó el borde de su manto para ser sanada:

¡Hija, tu fe te ha hecho salva; ve en paz, y queda sana de tu azote! (Marcos 5:34)

La biblia también señala que en Nazaret, su tierra, Jesús no pudo sanar a algunos por la falta de FE 

Y no pudo hacer allí ningún milagro, salvo que sanó a unos pocos enfermos, poniendo sobre ellos las manos. Y estaba asombrado de la incredulidad de ellos” (Mateo 6:5-6)

Por lo mencionado vemos que por Jesucristo podemos tener SANIDAD, que Él cargó sobre sí todas las enfermedades físicas, que en Él está la promesa de sanidad, la que se recibe por FE en él, es por FE que tenemos acceso a esta bendición, como también a la de ser libres, a tener paz, y como todo lo que es parte de la bendita gracia de Dios, se alcanza por medio de la FE.

Gracias por visitar el Blog, y que Dios te bendiga.


En nombre de Jesucristo, amén.

27/4/18

No Se Aflijan Por Nada

Varias son las formas, en como el mal ataca nuestras vidas, ejemplos: enfermedades, mentiras, miedos y muchos más, y cada forma viene a causar un daño distinto, y en menor o mayor magnitud; obviamente no vienen a favorecer nuestras vidas, sino que llegan con la intención de perjudicarnos. A cada suceso, cada persona lo puede afrontar de distintas maneras, y puede ser que tenga éxito, o también que no, porque somos imperfectos y podemos fallar.
Pero en cambio, no importar la forma en que el mal ataque, no importar el daño que venga a causar, tampoco importa la magnitud del daño que quiera ocasionar, si es que hemos aceptado en nuestras vidas, a esa persona que no falla, que es perfecto (Mt. 5:48), que es fiel (2 T. 2:13), que no miente (Núm. 23:19), que tiene toda potestad en el cielo y en la tierra (Mt. 28:18), es alguien que con su ayuda podemos vencer cualquier tipo de mal en nuestras vidas (Rom 8:37), es Jesucristo quien venció la muerte y el pecado (1 Pedro 2:22).
Por ejemplo, para eso malos momentos, en donde la angustia, las preocupaciones, ansiedades y aflicciones quieren invadirnos, Jesucristo nos dice lo siguiente:

No se aflijan por nada, sino preséntenselo todo a Dios en oración; pídanle, y denle gracias también. Así Dios les dará su paz, que es más grande de lo que el hombre puede entender; y esta paz cuidará sus corazones y sus pensamientos por medio de Cristo Jesús. Filipenses 4:6-7, (DHH)
 
Lo citado es Palabra De Dios, palabra fiel y verdadera (1 T. 4:9), por lo tanto no puede fallar (Jn. 10:35), así que querido lector, solo queda hacer tu parte, que es poner tu Fe en Cristo, vivir para Él, o sea convertirte a Dios, y entonces la bendición que nos dice el verso mencionado, será realidad en tu vida, Él tomara tus preocupaciones, ansiedades, angustias… y te dará su Paz, y después de esta vida, podrás tener parte en su reino, pero recuerda que hay que cumplir con Dios, para que él cumpla con nosotros.
Gracias por visitar el Blog, que Dios te bendiga.



En nombre de Jesucristo, amén.

 Base Bíblica

Mateo 5:48 Sed, pues, vosotros perfectos, como vuestro Padre que está en los cielos es perfecto.
2 Timoteo 2:13 Si fuéremos infieles, él permanece fiel; El no puede negarse a sí mismo.
Números 23:19 Dios no es hombre, para que mienta…
Mateo 28:18 Y Jesús se acercó y les habló diciendo: Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra.
Romanos 8:37 Antes, en todas estas cosas somos más que vencedores por medio de aquel que nos amó.
1 Pedro 2:22 el cual no hizo pecado, ni se halló engaño en su boca;
1 Timoteo 4:9 Palabra fiel es esta, y digna de ser recibida por todos.
Juan 10:35…la Escritura no puede ser quebrantada.

21/4/18

Para El Perdón De Nuestros Pecados

En cuanto al Perdón de nuestros pecados, generalmente nos encontramos con “El Arrepentimiento”, como condición fundamental para recibir el perdón de Dios, pero la Biblia nos habla de otras condiciones más, dignas de mencionarlas, pues no están de más y tienen también su importancia, y a continuación trataremos el arrepentimiento y las demás condiciones para obtener “El Perdón de Nuestros Pecados”.

El arrepentimiento parece ser una de las condiciones mas divulgadas, para obtener  el perdón de nuestros pecados, y a seguir un verso, que nos muestra claramente el ARREPENTIMIENTO para el perdón.

…en su nombre se predicara el arrepentimiento para el perdón de los pecados... (Lucas 24:47 - La Biblia de las Américas).

Así que debemos proceder oportunamente al arrepentimiento para poder recibir el perdón de nuestros pecados.

Después de habernos arrepentidos podemos poner en segundo lugar a la FE, como lo predico Jesús …arrepentíos, y creed en el evangelio. (Marcos 1:15)”; los siguientes versos muestran que por la FE recibimos perdón de pecados

…todos los que en él creyeren, recibirán perdón de pecados por su nombre. (Hechos 10:43)

…para que reciban, por la fe que es en mí, perdón de pecados… (Hechos 26:18)

Convertirse a Dios: Puedes arrepentirte verdaderamente de tus pecados y tener FE en Jesucristo, pero si no te conviertes a Dios, no alcanzaras su perdón.

…para que no se conviertan, y les sean perdonados los pecados. (Marcos 4:12)

…Vuélvanse a Dios y bautícese cada uno en el nombre de Jesucristo, para que Dios les perdone sus pecados, y así él les dará el Espíritu Santo. (Hechos 2:38 - DHH)

Así que, arrepentíos y convertíos, para que sean borrados vuestros pecados… (Hechos 3:19)

4° El Bautismo en las aguas: Podemos decir, que después que alguien se haya “arrepentido, y tenga fe y se convierta a Dios”, entonces el bautismo en las aguas puede realizarse. Uno de los significados del bautismo en agua es el lavamiento de nuestros pecados, y también es llamado “Bautismo de Arrepentimiento”. A seguir algunos versos que nos hablan, del bautismo como una condición más, para el perdón de nuestros pecados.

el bautismo de arrepentimiento para perdón de pecados. (Marcos 1:4)

…Vuélvanse a Dios y bautícese cada uno en el nombre de Jesucristo, para que Dios les perdone sus pecados, y así él les dará el Espíritu Santo. (Hechos 2:38 - DHH)

Levántate y bautízate, y lava tus pecados, invocando su nombre. (Hechos 22: 16)

Bueno hasta aquí el análisis de las condiciones para el perdón de los pecados, pero conste, que el hecho de que alguien diga haberse arrepentido, y tener fe en Cristo y se haya bautizado en agua, no garantiza que se ha arrepentido y convertido a Cristo verdaderamente , es el tiempo que dará testimonio, si en verdad es o no es un verdadero creyente, como Cristo dijo "por sus frutos los conoceréis" (Mateo 7:16).

Gracias por visitar el blog, que Dios te bendiga. 


En nombre de Jesucristo, amén.